Revolución Pagos Digitales: A2A, Billeteras y Gigantes

El Ascenso de los Pagos Digitales

Los pagos digitales han evolucionado rápidamente de una tendencia incipiente a una fuerza dominante tanto en el comercio en línea como en el físico, superando los métodos de pago tradicionales como el efectivo y las tarjetas.

En 2014, los pagos digitales, que comprenden billeteras digitales, transferencias A2A, ‘compre ahora, pague después’ (BNPL) y criptomonedas, representaron el 34% del valor del comercio electrónico. Para 2024, esta proporción casi se había duplicado al 66%, lo que demuestra el notable cambio en el comportamiento del consumidor.

Esta transformación es igualmente evidente en las transacciones en el punto de venta (POS). En 2014, los pagos digitales representaban un mero 3% del valor de los POS. Una década después, esta proporción se había multiplicado por casi diez hasta el 38%, lo que significa la creciente aceptación y conveniencia de las opciones de pago digital en las tiendas físicas.

Los pronósticos predicen que esta trayectoria ascendente continuará. Para 2030, se proyecta que los pagos digitales representarán el 79% del valor del comercio electrónico global, lo que se traduce en un gasto en línea estimado de US$ 8.6 billones. Además, se espera que representen el 53% del gasto en las tiendas físicas, lo que consolida su posición como el método de pago preferido por los consumidores en todo el mundo.

Empresas Fintech: Catalizadores de la Innovación

Las empresas Fintech se han convertido en impulsores fundamentales de la innovación en el panorama de los pagos globales, alterando fundamentalmente la forma en que los consumidores interactúan con los servicios financieros. Los principales actores como Alibaba, Apple y Google han revolucionado el panorama de los pagos al introducir billeteras digitales fáciles de usar y eficientes.

Estas billeteras digitales han ganado una adopción generalizada a nivel mundial, representando el 53% de las transacciones de comercio electrónico y el 32% del gasto en POS en 2024. Su valor total alcanzó la impresionante cifra de US$ 15.7 billones el año pasado, un aumento de diez veces desde US$ 1.6 billones en 2014. Este asombroso crecimiento subraya el impacto transformador de las billeteras digitales en el ecosistema de pagos.

Los innovadores Fintech como Affirm, Afterpay, Klarna y PayPal también han revolucionado el crédito al consumidor con ofertas de ‘compre ahora, pague después’ (BNPL). Estas soluciones han experimentado un crecimiento exponencial en popularidad durante la última década, aumentando de solo US$ 2.3 mil millones en valor de transacción de comercio electrónico a nivel mundial en 2014 a la notable cifra de US$ 342 mil millones para 2024.

De cara al futuro, se proyecta que BNPL mantendrá una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 9% hasta 2030, alcanzando aproximadamente US$ 580 mil millones. Mientras tanto, se espera que el gasto total del consumidor a través de billeteras digitales supere los US$ 28 billones para 2030, lo que consolidará aún más su dominio en el panorama de los pagos.

El Auge de las Transacciones A2A: Impulsado por Rieles de Pago en Tiempo Real

Los pagos A2A han sido testigos de un aumento significativo en el uso, impulsado por el auge de los sistemas de pago instantáneos o en tiempo real. Solo en el comercio electrónico, los pagos A2A experimentaron un asombroso crecimiento del 515% entre 2014 y 2024, elevándose de US$ 152 mil millones a US$ 936 mil millones.

Este aumento se debe principalmente a la creciente adopción de sistemas de pago instantáneos o en tiempo real. En los 40 mercados cubiertos en un informe de pagos globales, 20 han lanzado con éxito plataformas de pago rápidas en la última década, lo que destaca la tendencia acelerada hacia las transacciones en tiempo real. Estos sistemas facilitan transacciones instantáneas y seguras, mejorando el flujo de efectivo, reduciendo los retrasos en el procesamiento y fomentando la innovación financiera.

Los mercados emergentes están liderando el camino en este espacio, con Pix de Brasil como un ejemplo destacado. Lanzado en noviembre de 2020, Pix ha ganado rápidamente terreno debido al fuerte respaldo del banco central, una experiencia de usuario consistente y costos relativamente bajos para los comerciantes. Hoy en día, tres de cada cuatro brasileños usan el sistema, y el valor de las transacciones de Pix ahora supera al de las tarjetas en los pagos en línea. Pix también ha impactado significativamente el uso de efectivo, con la participación del efectivo en el valor de las transacciones de POS en Brasil cayendo del 35% a solo el 17% entre 2020 y 2024.

En Brasil, Pix ha desempeñado un papel crucial en el impulso del auge de los pagos A2A. En 2024, el valor del pago de comercio electrónico A2A en Brasil alcanzó los US$ 35 mil millones, un notable aumento de 35 veces desde apenas US$ 1.2 mil millones en 2014.

El Papel Duradero de las Tarjetas de Pago

A pesar de la creciente competencia de las innovaciones de pago digitales, las tarjetas de pago continúan ocupando una posición central en el ecosistema de pagos global. Esto se debe en parte a la integración de nuevas tecnologías y características por parte de las redes y emisores de tarjetas, con el objetivo de alinearse con las expectativas cambiantes de los consumidores.

Click to Pay, por ejemplo, representa un sistema de pago en línea estandarizado y seguro diseñado para agilizar y unificar la experiencia de pago en sitios web y dispositivos, reflejando la funcionalidad de las tarjetas con chip y los pagos sin contacto en el mundo físico. Click to Pay fue desarrollado por EMVCo, un organismo técnico global propiedad colectiva de las principales redes de pago, incluidas Visa, Mastercard, American Express y UnionPay.

Otra innovación es Visa Flexible Credential (VFC), una innovación de pago digital de Visa que permite que una sola tarjeta digital contenga y acceda a múltiples tipos o cuentas de pago, incluidas tarjetas de crédito y débito, BNPL y puntos de recompensa. Esto ofrece a los consumidores mayor flexibilidad y control sobre sus opciones de pago.

Paze, una solución de pago digital, permite a los consumidores realizar compras seguras en línea sin compartir sus números de tarjeta reales con los comerciantes, mejorando la seguridad y la privacidad. Fue creado por Early Warning Services, un consorcio de bancos estadounidenses que también gestiona la red de pagos interbancarios Zelle.

En 2024, las tarjetas de crédito, débito y prepago representaron el 45% del valor total de las transacciones globales en los canales de comercio electrónico y POS. Sin embargo, esta cifra subestima el impacto total de las tarjetas, ya que también sirven como la fuente de financiación subyacente para muchas billeteras digitales. Una encuesta global reveló que el 56% de los consumidores financian sus billeteras digitales con tarjetas de crédito o débito.

Al tener en cuenta tanto el uso directo de la tarjeta como el uso indirecto a través de billeteras digitales, se estima que las tarjetas son responsables de aproximadamente el 65% del gasto global del consumidor en 2024, lo que equivale a unos US$ 29 billones.

De cara al futuro, se proyecta que ese valor representará el 56% del valor global del pago del consumidor para 2030, alcanzando un estimado de US$ 32.5 billones, lo que demuestra el poder y la relevancia duraderos de las tarjetas de pago en el panorama de pagos en evolución.

La Continua Disminución del Uso de Efectivo

El cambio global hacia los pagos digitales ha impactado directamente el uso de efectivo. Durante la última década, la participación de los pagos en efectivo se ha desplomado, cayendo del 44% del gasto en las tiendas físicas en 2014 (poco más de US$ 16 billones) a solo el 15% en 2024, lo que representa una reducción de US$ 10.5 billones en valor.

A pesar de esta fuerte disminución, el efectivo sigue siendo un método de pago fundamental en muchas comunidades. Esto es especialmente evidente en países como Colombia, Indonesia, Japón, México, Nigeria, Perú, Filipinas, España y Vietnam, donde el efectivo siguió siendo el principal método de pago en persona en 2024.

Incluso en mercados como los países nórdicos, a menudo considerados entre los más avanzados en términos de sociedades sin efectivo, el uso de efectivo sigue siendo relevante, representando entre el 5% y el 7% del valor de las transacciones de POS en 2024. Esto destaca la persistencia del efectivo como una opción de pago, incluso en economías digitalmente avanzadas.

Los pronósticos predicen que el uso de efectivo continuará disminuyendo, aunque a un ritmo más lento. De 2024 a 2030, se espera que el uso global de efectivo disminuya a una CAGR del 2%, alcanzando una participación del valor global de POS del 11% para entonces, o poco menos de US$ 5 billones.

Criptomonedas y Finanzas Integradas: Moldeando el Futuro de los Pagos

De cara al futuro, se espera que las tendencias, incluidas las finanzas integradas y las tecnologías novedosas como las criptomonedas, configuren el panorama de los pagos en los próximos años.

Se proyecta que el gasto global en criptomonedas se duplicará con creces en los próximos cinco años, de US$ 16 mil millones en 2024 a US$ 38 mil millones en 2030, lo que indica una creciente aceptación y utilización de las criptomonedas para las transacciones.

Las finanzas integradas también están preparadas para un crecimiento significativo. McKinsey estima que para 2030, el mercado de finanzas integradas en Europa superará los 100 mil millones de euros, representando del 10% al 15% de los fondos de ingresos bancarios. Esto marca un aumento sustancial desde 2023, durante el cual el mercado generó entre 20 mil millones de euros y 30 mil millones de euros, o aproximadamente el 3% de los ingresos bancarios totales.

A escala global, se espera que el mercado de finanzas integradas alcance un tamaño de US$ 7.2 billones para 2030, según un informe de Dealroom y ABN AMRO Ventures. Esto subraya el inmenso potencial de las finanzas integradas para transformar la industria de servicios financieros y remodelar la forma en que los consumidores interactúan con los productos y servicios financieros.

La convergencia de las transacciones A2A, la proliferación de las billeteras móviles y el poder innovador de los gigantes tecnológicos están revolucionando el panorama de los pagos digitales. A medida que avanzamos, las tecnologías emergentes como las criptomonedas y las finanzas integradas refinarán y mejorarán aún más las formas en que las personas realizan transacciones, impulsando al mundo hacia un futuro financiero más digitalizado. Las tendencias descritas anteriormente no son simplemente modas pasajeras, sino cambios fundamentales que redefinirán el futuro de los pagos en los años venideros.