El mundo de la consultoría está experimentando una transformación significativa, con la inteligencia artificial (IA) asumiendo tareas que antes realizaban los empleados junior. McKinsey & Company, una firma de consultoría global líder, está a la vanguardia de este cambio, confiando cada vez más en su plataforma de IA generativa para redactar propuestas y crear diapositivas de PowerPoint. Este movimiento significa un cambio fundamental en la forma en que operan las firmas de consultoría y asignan recursos, lo que podría afectar los roles y responsabilidades de los consultores en todos los niveles.
El auge de la IA en la consultoría: la plataforma Lilli de McKinsey
La plataforma de IA de McKinsey, conocida como Lilli, es un sistema propietario diseñado para aprovechar la extensa base de conocimientos de la firma y optimizar diversas tareas de consultoría. A diferencia de las herramientas de IA disponibles públicamente como ChatGPT de OpenAI, Lilli permite a los consultores ingresar datos confidenciales de los clientes con confianza, lo que garantiza la seguridad y el cumplimiento de los datos. Esto es crucial para mantener la confianza del cliente y proteger la información confidencial en el competitivo panorama de la consultoría.
Lilli ofrece una gama de capacidades impulsadas por IA, incluida la capacidad de generar diapositivas de PowerPoint a partir de indicaciones simples y garantizar que los informes mantengan el tono apropiado a través de una función llamada "Tono de voz". Estas herramientas están diseñadas para mejorar la eficiencia y la coherencia, lo que permite a los consultores centrarse en el pensamiento estratégico de nivel superior y la interacción con el cliente.
Llamada así en honor a Lillian Dombrowski, la primera mujer profesional contratada por McKinsey en 1945, Lilli ha evolucionado rápidamente desde su lanzamiento en 2023. Hoy, McKinsey considera a Lilli como un miembro integral de sus equipos de consultoría, con más del 75% de los empleados de la firma utilizando activamente la herramienta mensualmente. Esta adopción generalizada subraya la creciente importancia de la IA en el proceso de consultoría y su potencial para remodelar la industria.
Eficiencia impulsada por la IA y el papel cambiante de los consultores
La integración de la IA en las operaciones de consultoría plantea preguntas sobre el futuro de los empleados junior y las tareas que suelen realizar. Sin embargo, el liderazgo de McKinsey sugiere que la IA no está destinada a reemplazar a los consultores, sino a aumentar sus capacidades y liberarlos de las tareas mundanas.
Según Kate Smaje, líder global de tecnología e IA de McKinsey, la IA puede automatizar tareas como la creación de presentaciones de PowerPoint, lo que permite a los consultores centrarse en actividades más estratégicas y valiosas para los clientes. Este cambio de enfoque puede conducir a mejores resultados para los clientes y una experiencia laboral más gratificante para los consultores.
En lugar de necesitar "ejércitos de analistas de negocios creando proyectos de poder", la tecnología puede manejar estas tareas, liberando a los consultores para participar en la resolución de problemas más complejos y la gestión de las relaciones con los clientes. Este cambio no se trata necesariamente de reducir el número de consultores, sino de permitirles realizar un trabajo de mayor valor.
La fuerza laboral de McKinsey y la adopción más amplia de la IA en la consultoría
McKinsey emplea actualmente a aproximadamente 40.000 empleados en todo el mundo, una disminución de más de 45.000 a finales de 2023. Si bien es difícil atribuir esta reducción únicamente a la adopción de la IA, está claro que la tecnología está desempeñando un papel cada vez más importante en la configuración de las necesidades de la fuerza laboral de la firma.
Otras firmas de consultoría también están adoptando la IA, tanto a través de herramientas internas como de servicios de consultoría centrados en la IA. Esta adopción generalizada sugiere que la IA no es solo una tendencia pasajera, sino un cambio fundamental en la forma en que se prestan los servicios de consultoría.
Bain & Company utiliza Sage, una plataforma de chat patentada impulsada por OpenAI, para mejorar la productividad de los consultores y el intercambio de conocimientos. La unidad Strategy& de PwC confía en Microsoft Copilot para ayudar con diversas tareas de consultoría, lo que demuestra los diversos enfoques que están adoptando las empresas para integrar la IA en sus operaciones.
Boston Consulting Group (BCG) ha experimentado un crecimiento significativo en sus servicios de asesoramiento relacionados con la IA, que ahora comprenden una quinta parte de sus ingresos totales. Este crecimiento destaca la creciente demanda de experiencia en IA entre los clientes y el potencial de las firmas de consultoría para capitalizar esta tendencia. BCG espera que sus ingresos relacionados con la IA sigan creciendo significativamente en los próximos años.
El ecosistema de IA en expansión
El ecosistema de IA de McKinsey se extiende más allá de su plataforma patentada, Lilli, para incluir asociaciones con empresas líderes de IA como Anthropic, Cohere y Mistral AI. Este ecosistema diverso permite a McKinsey acceder a las últimas tecnologías de IA y adaptar las soluciones para satisfacer las necesidades específicas de sus clientes.
Al asociarse con múltiples proveedores de IA, McKinsey puede ofrecer una gama más amplia de capacidades de IA y evitar quedar atrapado con un solo proveedor de tecnología. Esta flexibilidad es crucial en el panorama de la IA en rápida evolución, donde constantemente surgen nuevas tecnologías y enfoques.
El brazo de IA de la firma, QuantumBlack, mejora aún más sus capacidades de IA, proporcionando experiencia especializada en áreas como el aprendizaje automático, la ciencia de datos y la estrategia de IA. Esta combinación de experiencia interna y asociaciones externas permite a McKinsey ofrecer soluciones integrales de IA a sus clientes.
El futuro de la consultoría: la IA como catalizador de la innovación
La integración de la IA en la consultoría está transformando la industria, creando nuevas oportunidades para la innovación y la eficiencia. Al automatizar las tareas rutinarias, la IA libera a los consultores para que se centren en actividades de mayor valor, como la planificación estratégica, la gestión de las relaciones con los clientes y la resolución de problemas complejos.
A medida que la tecnología de IA continúa evolucionando, es probable que desempeñe un papel aún mayor en el proceso de consultoría. Las firmas de consultoría que adopten la IA e inviertan en el desarrollo de sus capacidades de IA estarán bien posicionadas para prosperar en el futuro.
El cambio hacia la consultoría impulsada por la IA también plantea preguntas importantes sobre las habilidades y la formación necesarias para los consultores en el futuro. Los consultores deberán desarrollar una sólida comprensión de las tecnologías de IA y cómo se pueden aplicar para resolver problemas empresariales. También deberán ser capaces de comunicarse eficazmente con los sistemas de IA e interpretar los resultados que generan.
La industria de la consultoría se encuentra en un momento crucial, con la IA a punto de remodelar la forma en que se prestan los servicios y los roles de los consultores. Al adoptar la IA y adaptarse al panorama cambiante, las firmas de consultoría pueden desbloquear nuevos niveles de eficiencia, innovación y valor para el cliente.